Deliberación sobre ética en la innovación

Queridos: 
Gracias por ayer. Fue una deliberación reveladora. Os comparto las reflexiones que más se me han quedado: 
1. Fernando, el catalizador de todo, comparte su inquietud con respecto a la velocidad con la que se está desarrollando la tecnología, la "ingenuidad" de los ingenieros que la están liderando, la falta de espacios de deliberación para hacerse las preguntas éticas importantes y el money-machine de Wall Street como principal driver del desarrollo tecnológico (no human purpose). 
2. Sergio comparte su experiencia, de cómo fue eficaz para alcanzar niveles de rentabilidad obscenos a través del machine learning en el sector financiero, de cómo el side-effect de esa rentabilidad le planteó dilemas éticos, de cómo eso le motivó a salirse, hacer una tesis sobre avatares digitales  (el ser humano puede salvarse haciéndose aliado de la máquina), y su fundación de Sci-the-world. Le preocupa la falta de meritocracia en los puestos que están liderando el desarrollo de la tecnología en las empresas grandes del Ibex-35, y concibe la ética como herramienta para la acción, para tomar mejores decisiones conducentes a mejores acciones ante situaciones  concretas. 
3. Alex comparte su experiencia como empresario de Alto Intelligence en el ámbito de las amenazas híbridas, cómo la ciberseguridad y la geopolítica se colocan en el top de las agendas de las empresas en un contexto donde la política se coloca por encima de la economía en el orden mundial. Nos habla de lo inabarcable que resulta la gestión de la ciberseguridad. Y nos comparte su nueva non-profit cyberguardians, que trata de dar luz a través de los datos del deterioro de la salud mental de los jóvenes en España como consecuencia de la adicción a la tecnología. Nos plantea la "gran mentira" de las empresas tecnológicas: la innovación es imparable y no puede regularse. 
4. Julio nos cuenta su itinerario filosófico, del estudio de la epistemología en Buenos Aires al estudio de la filosofía analítica en San Francisco, pasando por toda su experiencia en el Mind Research Institute de Berkeley y la ontología social. De cómo cambiando las narrativas mentales, el ser humano puede alcanzar mayor libertad. Nos habló de dos impulsos básicos del ser humano: el ¿por qué? ante la incertidumbre, la complejidad, el ser humano necesita certezas, aunque no sean lógicas a veces. Y ¿está bien o está mal? es decir, el impulso ético, porque somos animales sociales, y necesitamos saber el impacto de nuestras acciones en el otro. De cómo era el ETHOS del early Silicon Valley: los fundadores de HP, al menos citaban a Aristóteles, aunque luego se ponían acto y seguido al mismo nivel. En ese early Silicon Valley, sí que existían al menos las preguntas.
5. Elena comparte cómo trabajó durante casi una década asesorando a grandes multinacionales en cómo defender sus intereses en debates públicos con un componente ético por el impacto en el bien común (for e.g., Airbnb y la saturación de las ciudades), dejó ese trabajó para dedicarse de lleno a la transparencia y el buen gobierno empresarial, algo que había desarrollado pro bono para Transparencia Internacional y la Fundación HAZ sobre todo en el sector de los medios de información. Su experiencia al matricularse en un curso de Historia de la Filosofía y escuchar al actual presidente del consejo académico de Ethosfera, Diego Garrocho, hablar de las dos muertes de la historia occidental (Sócrates y Jesús), fue tan transformador, que decidió fundar Ethosfera con la vocación de acercar esa sabiduría a la innovación empresarial (ética e innovación crítica). La ética, la deliberación y el pensamiento crítico como herramientas para la toma de decisiones en los órganos de gobierno y dirección en empresas es la propuesta de valor de Ethosfera.